Shadows and lights

Somos la suma de muchas cosas. De países, colores,  dolores, traiciones, familias, construcciones, fracasos, cobardías y perdones, de alegrías, de valles, de flores, de luces y de sombras... 

La vida no es fácil para nadie, me lo ha enseñado el 2015; la vida no es justa, la vida no es descifrable. 

La Tierra se encuentra en medio del cielo y del infierno, por eso a veces nos sentimos en el paraíso y otras veces nos vemos envueltos en sufrimientos que parecen no terminar. Pero esa es la vida, y vale la pena vivir ambas caras de ella. Todas sus facetas son interesantes y nos enseñan cosas. A mí me ha enseñado este año que aunque el tiempo pase lento o muy rápido, nada permanece estático y todo corre el riesgo de cambiar, marchitarse o morir pero también de crecer y mejorar.  Hasta lo perfecto se acaba dice la Biblia, pero también dice que su Palabra no; Él permanece con un amor intacto y fiel para siempre. En medio de un mundo que no para de girar, y un ser interno que no deja de sorprendernos (para bien o para mal) lo único que se mantiene igual es Dios, eso es un consuelo para el alma. Él es la roca eterna, ancla firme, esperanza de gloria y fiel por la eternidad hacia nosotros. 

No estaremos nunca perdidos si nos perdemos en Él. 

Por cierto lo que llevo puesto es de una diseñadora mexicana, de verdad están increíbles sus prendas, como este vestido capa, una pieza clave para esta temporada, y que mejor que en tinto. 

FOTOGRAFÍA: Christian Cardiel

Vestido: María Julia para Pret a Porter

Sneakers: Enzo Angiolini

Bolso: Burberry

Collar: Centro Joyero Gdl